Los protagonistas del espectáculo estaban entregados en cuerpo y alma, sin embargo el árbitro, la verdad, atravesó una noche negra. En los instantes postreros cometió un fallo de dimensiones épicas que dejaron perplejo al respetable. ¡Auténtico esperpento!Los más esperpénticas meteduras de pata arbitralesEn el universo del deporte rey,